Mi Carrito
13 julio 2020

Descubre el mundo de las joyas de oro

El oro es un metal precioso de color amarillo brillante con el que se han elaborado infinidad de joyas de oro a lo largo de la historia.

Para hablar de las primeras joyas de oro, nos tenemos que remontar al año 3.000 a.C., concretamente a Mesopotamia y al Antiguo Egipto. Prueba de ello es el hallazgo del Tesoro de Nimrod, el cual perteneció a las reinas asirias hace 3.000 años.

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Pero ¿qué sabemos sobre el oro? ¿De dónde se extrae el oro? El oro se extrae de la naturaleza y es uno de los elementos más escasos del planeta. Este codiciado metal originó la llamada “fiebre del oro” en el siglo XIX en Estados Unidos, en concreto, en California en 1848, y la cual finalizó alrededor de la década de los 60.

La extracción de oro es un trabajo tedioso. Se puede encontrar oro en forma de vetas en grietas de la corteza terrestre, removiendo grandes cantidades de suelo y subsuelo, y también en los sedimentos de los ríos, separando el oro de la arena del río mediante el uso de mercurio. Con el primer método mencionado es necesario remover alrededor de 3 millones de toneladas de tierra para obtener una tonelada de oro.

Si te gustan las joyas de oro y sientes curiosidad por saber más sobre este metal precioso, no dejes de leer este artículo. ¿Conoces los diferentes tipos de oro que existen? ¿Qué es un quilate? ¿Cómo se puede comprobar la composición de una joya de oro? ¿Cómo se obtienen los colores del oro rosa, rojo y blanco? ¿Qué es una joya de oro macizo? ¿Cuál es la diferencia entre bañado en oro y chapado en oro? ¿Cómo cuidar las joyas bañadas en oro o chapadas en oro?  En este artículo daremos respuesta a todas estas preguntas.

TIPOS DE ORO O ALEACIONES DE ORO

Es importante que sepas que no todas las joyas de oro tienen la misma calidad. Así como la unidad de pureza de la plata son las milésimas, la pureza del oro se mide en quilates. En nuestro caso, Susana Requena elabora joyas en oro de 18 quilates (18k), oro de primera ley, el más utilizado en joyería.

Como el oro es un metal blando, es preciso trabajar con aleaciones de oro en las que se mezcla el oro puro con otros metales para proporcionar dureza a este metal tan maleable y dúctil. Cuando hablamos de quilates estamos haciendo referencia a la proporción de partes de oro que tiene la aleación que se usa para fabricar joyas de oro. El número máximo de quilates es 24k, por lo que 24 partes de oro es el proporción máxima de oro puro que puede tener una aleación de oro.

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Según su grado de pureza, podemos hablar de cinco tipos de oro o aleaciones de oro:

El oro de 24 quilates (24k) es el llamado “oro puro”, con un 99,9% de pureza. Los metales preciosos se consideran puros cuando tienen, al menos, 999 milésimas de oro. Cualquier metal, por puro que sea, siempre contiene una pequeña cantidad de impurezas debido a las propiedades químicas y físicas derivadas de su obtención, por lo que no podemos hablar de 100% oro puro ni de 100% plata pura. 

El oro de 18 quilates (18k) es también llamado “oro de primera ley” u “oro alto”. El oro 18k tiene un 75% de pureza, por lo que también se le llama “oro de 750 milésimas”. Esta aleación de oro de ley contiene 18 partes de oro puro y 6 partes de otros metales. 

El oro de 14 quilates (14k), conocido también como “oro de segunda ley” y “oro bajo”, tiene un nivel de pureza del 58,5%. Esta aleación de oro está formada por 14 partes de oro puro y 10 partes de otros metales.

El oro de 12 quilates (12k) es la aleación de oro que presenta un 50% de oro puro, lo que equivale a 12 partes de oro puro y 12 partes de otros metales.

El oro de 10 quilates (10k) es el oro de más baja pureza, con solo un 40% de oro puro. La aleación del oro de 10k se realiza con 10 partes de oro puro y 14 partes de otros metales.

¿Cómo se puede comprobar la composición de una joya de oro?

Ahora que conoces los diferentes tipos de aleaciones de oro, te enseñaremos cómo comprobar la composición de una joya de oro. Para ello, debes fijarte en el marcado y etiquetado de las joyas.

Todas las joyas de oro y de cualquier otro metal precioso que se quieran comercializar en España deben tener visible los llamados “contrastes de origen y de garantía”, tal y como señala Reglamento de la Ley de objetos fabricados con metales preciosos. Estas marcas se realizan con punzones específicos creados por la Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre.

El contraste de origen sirve para identificar el origen, es decir, el fabricante o importador. Sin embargo, el contraste de garantía es la marca que deben llevar las joyas de oro en la que conste la “ley de la aleación”.  Es decir, tenemos que indicar la clase de metal utilizado y la calidad del mismo, como por ejemplo “oro de primera ley” u “oro de segunda ley”. Un laboratorio de contrastación de objetos de metales preciosos garantizará que la aleación cumpla con la ley de oro que viene señalada en la pieza.

Si no ves a simple vista la marca de garantía, puedes solicitar al joyero que te lo muestre para comprobar la composición de la pieza. Asimismo, el citado reglamento señala también que en el caso de “los objetos de tamaño reducido, o que por las peculiaridades de su diseño no se puedan punzonar con los contrastes obligatorios, se comercializarán, cuando sea técnicamente posible, soldando a éstos una placa del mismo metal y de la misma «ley» previamente punzonada con los contrastes de origen y garantía. Cuando no resulte técnicamente posible se comercializarán con una etiqueta en la que figuren la «ley» del metal y la identificación del fabricante o importador.”

En nuestro caso, Susana Requena ofrece a los clientes un certificado de garantía que tiene una duración de dos años, el cual verifica la composición y calidad de cada una de las joyas para mujer que vendemos.

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¿Cómo se consiguen los colores del oro?

Habrás oído hablar del oro amarillo, oro blanco, oro rosa e incluso del oro rojo, pero ¿sabes cómo se obtienen esos colores de oro? Estas clases de oro tienen 75% de oro puro, pero en cada caso, presentan una proporción diferente de otros metales como plata, cobre y paladio.

El oro amarillo es el oro de 18 quilates (18k), el cual se obtiene a partir de una aleación que contiene 750 gramos de oro fino, 125 gramos de plata fina y 125 gramos de cobre.

Sin embargo, el oro rojo es la aleación de oro con 750 g. de oro fino y 250 g. de cobre. El oro rosa tiene la misma proporción de oro más 50 g. de plata y 200 g. de cobre.

En el caso del oro blanco, su aleación tiene 750 g. de oro fino, una pequeña proporción de paladio (100-160 g.) y de plata fina (150-90 g.).

¿Qué es una joya de oro macizo?

Hablamos de oro macizo cuando nos referimos a las joyas de oro que no tienen el interior hueco. En contraposición, aunque en la actualidad siguen existiendo joyas de oro macizo, proliferan las piezas bañadas en oro o chapadas en oro.

¿Cuál es la diferencia entre baño de oro y chapado en oro?

Numerosas marcas ofrecen joyas que no son de oro macizo, pero que tienen un acabado en oro, ya sea baño de oro o chapado de oro.

En comparación con las joyas de oro macizo, las piezas bañadas en oro o chapadas en oro tienen un precio más bajo. Además, abarcan una amplia variedad de modelos, lo que permite a las marcas, con un menor coste, seguir las tendencias del mercado y vender mayor número de unidades.

El chapado de oro se realiza colocando una placa de oro sobre otro metal, generalmente plata o cobre, a través de medios electromagnéticos o químicos. La joyería de oro chapado, realizada en piezas lisas, se remonta a finales del siglo XIX y fue muy utilizada en Europa hasta la Segunda Guerra Mundial.

El baño de oro consiste en cubrir la pieza de joyería con una fina capa de oro. La calidad del baño viene dado por el espesor y el porcentaje de oro puro. Las piezas bañadas en oro se fabrican con un metal diferente al oro, que puede ser plata, latón, acero, cobre o níquel, y mediante el proceso de electrólisis se les imprime una capa de oro que se queda adherida al metal.

La mayor diferencia entre chapado de oro y baño de oro es el grosor de su capa, el cual se mide en micras. Cuanto más gruesa sea la capa de oro, más duradera será. Así, mientras que la capa de oro de una pieza chapada en oro puede tener un grosor de 3 a 10 micras, los baños de oro oscilan desde 0,1 a 2 micras de espesor.

Nuestra firma Susana Requena fabrica joyas bañadas en 2 micras de oro de 18k sobre una base de plata 925 o de fino metal (latón). Además, ofrece joyas de plata 925 chapadas en oro 18k, concretamente en 3 micras de oro, como algunas joyas de la colección Pluma Real.

¿Cómo cuidar las joyas bañadas en oro o chapadas en oro?

Para conservar en buen estado tus joyas bañadas o chapadas en oro u plata, debes evitar aplicar perfumes y cremas sobre las piezas. Estos productos podrían oxidar las joyas y alterar el color del metal disminuyendo la capa dorada y dejando entrever el color del metal base de la pieza.

El roce de la pieza con la ropa u otras joyas puede contribuir a que desaparezca antes la capa de oro. El sudor y el agua de mar afectan al deterioro de las joyas bañadas o chapadas en oro. Asimismo, es recomendable no mojar las piezas y llevarlas siempre sobre la piel seca y limpia para que las joyas doradas o plateadas duren más tiempo en perfecto estado.

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